camina por el sol que la sombra hiela corazones.
fue en el último mes
que devoré
tres trozos de luna llena.
el primero se des-hi-zo
liviano
encima
del roce,
debajo
del pulso,
en tacto
progresivo
desde el abrazo
impaciente.
el segundo pedazo
fue una j jugosa
en jadeante juego
de justa jerga:
jardín de jericó mojado
que jamás jaula al júbilo
de la juventud
junta en juerga
para la jornada.
el tercer mordisco
me desangró el miedo.
∼ ¤ ∼
isla rota
con la memoria rota
simulacro de perla
tienes la raíz descuartizada
isla enmohecida
óxido de masa acuclillada
penitente idiosincrasia del olvido
bestia mitológica con huesos de aluminio
y sangre de plomo
isla líquida
deshidratada
estatua de sal
si te faltaran los clavos
¿existirías?
isla rota
con la memoria rota
intento paradójico de consonancia
hiedes a pescado putrefacto
cuando dices
libertad
∼ ¤ ∼
los adioses son
como la tristeza convertida en piel,
encarnada.
como un puñal atravesando la existencia
perpetua,
sin torrente de salida.
decir adiós
puede ser una apuesta al número equivocado.
es
volver a empezar siendo quien se era,
solo para dejar de serlo.
confundirse no es el peor de los problemas.
el problema es que la vida no te cambie demasiado,
que no te cambie,
que no.
Ausencia aleatoria
Karla Ferrer Arévalo, 2018
Edición y corrección: Ed. Nítido (Montevideo, Uruguay)
Ilustraciones, diseño, diagramación, y encuadernación: Karla Ferrer Arévalo
Impreso y ensamblado en San Juan, Puerto Rico, en diciembre de 2018.
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