Así es la vida,
simplemente construir cosas nuevas.
Levantar el papel y
retomar la tinta guardada en el armario,
sacar las velas y encenderlas,
y si es posible
sacudir los trapitos llenos de polvo;
esos que abrazaban cada una de estas cosas.
La inspiración, ¡por fin, sé de dónde sale!
Los secretos aún permanecen,
y mis manos;
mis manos aún adornan el arte plasmado en tinta.