Selección de poemas de Mauricio Merino (Chile, 1999)

Los poemas de Mauricio Merino fluctúan entre dos temas centrales: el erotismo y la propia relación con la escritura. Ambos temas, por lo demás, suelen (aunque no siempre) estar marcados por la nostalgia o el anhelo de algo perdido; podríamos inferir que se trata del momento ya lejano en que el hablante poético aún no ha perdido la inocencia y no llega a percibir el doble filo que ahora le presentan sus motivos escriturales. Porque ahora se escribe, pero un abismo rodea la acción; pareciera que la comprensión del por qué hacerlo solo puede alcanzarse en el acto mismo, en lo que se convierte a la vez en una exploración a oscuras del yo interior, dolorosa por lo demás.

La poesía, entonces, se da en una tensión que resulta necesaria. En lo que respecta al tema del deseo, la relación no difiere mucho; la escritura da cuenta de una búsqueda del placer que, llegada a su fin, solo deja vacío. En ese vacío se sitúa, luego, una nueva búsqueda de la mano del hacer poético. El instante del poema es la tensión del frenesí o, en otros casos, la reflexión en torno a su residuo.

Responsabilidades.

Piedras que
puedes cargar,
pero que no
puedes lanzar.

Querida poesía.

No te enojes conmigo
si recurro a ti
sólo en momentos
críticos.

Te pido perdón
ante cualquier cosa.

No estoy acostumbrado
a luchar sin ti,
me convertí en una especie
de dependiente emocional,
me miento a mí mismo,
me forjo diariamente a
leerte,
a sentirte en cualquier cosa,
todo es tan forzado,
sé que me he olvidado
de ti gradualmente,
me he vuelto
un insensible
poco emocional
no puedo describir
sentimientos básicos,
sensaciones que antes
podría haber explicado
fácilmente.

¿Por qué me haces esto?

Yo te tomo como salvadora de todos los tiempos.

Por favor,
a mí no me tomes como
oportunista ciego
sólo de momentos.

Mil veces

Te diría mil veces
te amo al oído,
pero me daría hipo
y llenaría de saliva
tu tímpano.

Nunca más.

El clásico
beso
de reconciliación,
el abrazo
post-lazo besítico,
el sexo animal
y un te amo
cayendo de
nuestros labios
secos y
dañados
de palabras
y desamor.

Sexo

Dos cuerpos desnudos
en la cama
de forma horizontal
se ven como una boca pálida
tratando de decir algo.

Mauricio Merino González (1999). Oriundo de Santiago, actualmente vive en Concepción. Estudia Psicología en la Universidad Andrés Bello. Mantiene un blog de citas e imágenes literarias / artísticas llamado Flores negras, activo en Instagram y Tumblr.

Fotografía de portada brindada por el autor.

A %d blogueros les gusta esto: