Escritora prolífica con una decena de libros publicados, Giselle Aronson volvió en 2021 con El hábito del tiempo (Azul Francia). Integrado por dieciocho cuentos y dividido en dos partes, el libro tiene como protagonistas a personajes con los que podríamos cruzarnos en las plazas que frecuentamos. El enfoque está puesto en cómo ciertas experiencias —familiares, cotidianas— y el paso del tiempo pueden imprimir heridas que no siempre terminan de cicatrizar. En lo que se cuenta y en la manera de contar se cristaliza un recorrido que excede lo literario. Por lo mucho que me gustó El hábito del tiempo, y con la idea de conocer más sobre el recorrido de su autora, decidí entrevistarla.
¿Qué lecturas te motivaron a empezar a escribir?
No sé si podría identificar alguna en particular. Creo que es el cúmulo de todo lo que leí y aprendí, pero también de la música, los escenarios de mi infancia, las personas que conocí, las experiencias vividas, lo anhelado. Con esa materia multiforme, uno construye. Yo lo intento a través de la escritura.
Sí puedo resaltar el libro Cien años de soledad como una bisagra. Al leerlo descubrí que se podía crear todo un universo con su lógica, su cronología, sus leyes, a través de las palabras. Fue una especie de revelación.
La publicación de El hábito del tiempo coincidió con el décimo aniversario de tu primer libro. ¿Algún recuerdo de aquella época que te gustaría compartir?
Ese fue un tiempo de una escritura muy «salvaje», muy poco condicionada por el «deber escribir». Creo que después una ya no vuelve a escribir así, de un modo tan virgen, despreocupado. Después una ya se contamina con las reglas, los márgenes, las ataduras.
¿Cómo y cuándo empezaron a surgir los cuentos de El hábito del tiempo? ¿Hubo alguno que te haya demandado más trabajo?
Creo que fue a partir del año 2014 o 2015. El primer cuento que surgió fue «Maquillaje indeleble», que es el que abre el libro y, precisamente, el que más trabajo me dio. Surgió de una historia que me contó Juan José Dimilta, un amigo. Compartíamos con él y su familia lugar de veraneo. Ese cuento tuvo miles de versiones, muchas modificaciones, recortes, agregados. A través de todos estos años fue transformándose hasta poco antes de su publicación. Fueron tantas las vueltas que un día me di cuenta de que ya ni me acordaba la historia que mi amigo me había contado, se me confundieron las ficciones.
¿Cómo conociste a Francisca Mauas, la editora de Azul Francia?
Con Francisca somos, como autoras, compañeras de editorial. Ambas publicamos libros de poemas a través de la editorial Halley y también nos une la amistad con Mariana Kruk, la editora de Halley.
Para escribir es necesario disponer de tiempo cuando se trabaja de otra cosa, ¿pero hay un momento del día que te guste más o en el que rindas mejor?
Ya lo creo, siempre es escaso el tiempo, por eso se lo vengo dedicando a mis textos. Ya no tengo un momento de mejor rendimiento. Como consecuencia de la necesidad de encontrar o fabricar tiempo de escritura, o de robarle al resto de las actividades y dedicaciones, desarrollé la habilidad de escribir casi en cualquier circunstancia. No importa la hora del día, el ambiente, la soledad o la compañía, el cansancio, lo único que importa es tener al menos dos horas para sumergirme en otra temporalidad y escribir.
Ya escribiste novelas, libros de cuentos y poemarios. Y por la frecuencia con la que publicás podemos imaginar que no falta mucho para el próximo libro. ¿Alguna pista que nos quieras dar?
Esta vez no sé cuándo será el próximo por varias razones, pero, fundamentalmente, porque es un libro completamente diferente a los que escribí hasta hoy. No puedo dar muchas pistas, sólo que no es una novela, ni cuentos ni poemas.
Al margen, tengo un par de proyectos literarios puestos a concursar, pero esa es otra historia.

Giselle Aronson nació en Gálvez, provincia de Santa Fe, en 1971 y actualmente reside en Haedo. Es escritora, fonoaudióloga y docente. Además, organiza talleres literarios presenciales y virtuales. Publicó con anterioridad los libros Cuentos para no matar y otros más inofensivos (Macedonia Ediciones, 2011), Poleas (Textos Intrusos, 2013), Dos (Milena Caserola, 2014), Sin ir más lejos (Macedonia Ediciones, 2014), Orden del vértigo (El 8vo Loco, 2014), Lo que no se sabe (Modesto Rimba, 2016), En el hueco que queda (Halley Ediciones, 2018), Modos de buscar refugio (Halley Ediciones, 2019) y Como si de verdad (2020).
IG: @giaronson / FB: Giselle Aronson